Hoy mi madre tuvo que tomar una difícil decisión, su pequeña “perrihija” y compañera se encuentra muy enferma, su calidad de vida se ha visto mermada y llegó a ese momento en que tienes que adelantar la despedida para no ver sufrir a ese pequeño ser que te ha dado tanto amor, es una forma muy difícil y dolorosa de decirle que lo amas.
No me imagino su desconsuelo, Candy ha sido parte de esta
familia desde hace años y de muchas formas ha sido mas atenta y mejor “hija” de
lo que nosotros hemos sido. Creo que lo que más quisiéramos es que esos
pequeños seres que adoptamos, al envejecer un día simplemente se queden
dormidos tranquilamente sin sufrimiento alguno. Me consta que Candy vivió una
vida feliz y que mi madre le dio todo el amor que tuvo y todos los cuidados que
pudo. Algunos dirán “es solo un perro”, para esos quizá si sea solo un perro,
para nosotros fue parte de nuestra familia, un motivo mas para despertarnos, un
pedacito de nuestro corazón, un pequeño bebe que alegro los días de mi madre.
Si lees esto Mamá, te mando un abrazo y todo mi amor.